Lille vs Borussia Dortmund: una oportunidad para los ‘dogues’

En la vuelta de los octavos de final de la Champions League, el Lille recibe al Borussia Dortmund. En el encuentro de ida, los alemanes no pudieron pasar del empate 1-1, así que, ahora, están obligados a ganar en Francia ante un rival que no esperaba llegar tan lejos en esta competición y que, por tanto, afronta la cita con más calma y, para colmo, con el apoyo de sus gradas. Si los germanos son eliminados, encajarán un mazazo más en un curso que ya es nefasto.

La etapa de Nuri Sahin como entrenador ya quedó atrás para dar paso a Niko Kovac, que tiene que devolver al Signal Iduna Park a los primeros puestos de la Bundesliga y que, de momento, no ha tenido tiempo para conseguirlo. Se halla en la zona media de la clasificación, así que un potencial acceso a los cuartos de final de la UCL se presenta como el ‘caramelo’ perfecto para que la dirección deportiva vea con buenos ojos dotarle de confianza a largo plazo en el club.

Así fue el partido de ida

En el partido de ida, para el que el Borussia Dortmund se presentaba como favorito por su mayor entidad y por la presencia del imponente ‘Muro Amarillo’ que siempre lo acompaña en su estadio, el Lille sorprendió forzando un 1-1 de lo más jugoso para la vuelta. El primer gol de la tardenoche lo marcó Karim Adeyemi para los locales. Fue en los primeros compases, conque la sensación de que esta sería una victoria relativamente fácil inundó a los aficionados.

Desafortunadamente para los hinchas congregados en el Signal Iduna Park y vestidos de negro y amarillo, los ‘dogues’ evitaron encajar más dianas durante un buen tramo del choque hasta que, bien entrada la segunda mitad, Hákon Haraldsson anotó el gol de las tablas que perdurarían en el resultado una vez sonó el pitido final. A pesar del empuje de los aficionados de casa en las postrimerías del enfrentamiento, los de Niko Kovac no fueron capaces de ganar.

A nivel táctico, hubo varios elementos interesantes. Uno de ellos es la continuidad, ya prácticamente perpetua, de Emre Can como defensa en lugar de centrocampista. Así, el Borussia gana variedad y técnica con Pascal Gross en la zona medular. En el Lille, llamó poderosamente la atención que Jonathan David se quedara sin ver puerta. Era una de las grandes amenazas de los galos, que contaron con el hermano de Kylian, Ethan Mbappé, como extremo derecho.

Momentos claves para asentar una rivalidad europea

Antes de este duelo de ida en los octavos de final de la Champions League, el Borussia Dortmund y el Lille solo se habían enfrentado en los octavos de final de la Europa League del año 2002. Entonces, los alemanes se impusieron gracias al valor doble de los goles anotados fuera de casa en caso de empate, pues los ‘dogues’ consiguieron un 0-0 en el Signal Iduna Park, pero, al canjear un 1-1 en su estadio, se facilitó el acceso de ronda para los negriamarillos.

Con el reciente empate en la ida de la UCL, se está empezando a tejer una numerología en la rivalidad entre estos proyectos que quizá se alimente más aún en el futuro cercano, pues, al fin y al cabo, el nuevo formato de la Champions League -para paliar la emoción por la Superliga Europea- comporta una ronda más de eliminatorias, oportunidades para más equipos y la sensación de que cualquiera puede quedarse fuera pronto. Véase el Manchester City de Pep.

Volviendo a la línea estadística antes trazada, hay, de momento, tres empates en el tablero entre el Borussia Dortmund y el Lille, así que aquel equipo que se imponga en la vuelta de los presentes octavos de final de la Champions League se hará con la ventaja en su rivalidad particular. Si el Lille se impone, dará un gran golpe sobre la mesa porque demostrará que es capaz de tenerle ganado el enfrentamiento directo a un titán de las grandes ligas en este plano.

Prácticamente el mismo descanso para los dos

Un tema socorrido esta temporada es el del descanso de las plantillas entre sus compromisos del holgado calendario de la FIFA. En este caso, el Borussia Dortmund y el Lille afrontan su segundo partido de esta eliminatoria europea con prácticamente el mismo descanso. Aunque los dos juegan cuatro días antes, los ‘dogues’ lo hacen un poco después y en casa, mientras que los negriamarillos lo hacen un poco antes, pero tienen que organizar su viaje a Francia.

Ante esta situación, ninguno de los dos cuerpos técnicos podrá quejarse de haber contado con menos margen que el otro a la hora de ordenar sus entrenamientos o sus sesiones de recuperación. Sí que resulta interesante que esto tendrá una influencia directa en el desarrollo del partido: al no haber mucho tiempo para la táctica, es bastante probable que el duelo sea un poco más alocado de lo normal, máxime con el 1-1 imperante, y que haya varios goles.

A este componente eminentemente deportivo hay que añadirle la emoción que los aficionados del Lille permearán al terreno de juego para que sus jugadores den el Do de pecho. Será fundamental que los veteranos de la plantilla del Borussia den un paso al frente para calmar a sus compañeros más jóvenes. Adeyemi, autor del gol del BVB en la ida, por ejemplo, quizá necesite del poso y la confianza de Emre Can en este tipo de escenarios para funcionar mejor.

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